Los hongos pueden sobrevivir en un vacío y temperaturas extremadamente bajas
Científicos de vanguardia afirman que los hongos son extraterrestres altamente evolucionados enviados a la Tierra por una raza alienígena.
El concepto original fue ideado por el filósofo Terrence McKenna.
La carcasa de una espora es uno de los materiales más densos en electrones de la naturaleza, hasta el punto de que casi se asemeja a un metal. Las corrientes globales pueden formarse en la superficie casi metálica de una espora transportada por el aire, que actúa como un repelente a la radiación extrema del espacio.
Es un pensamiento alucinante que algo pueda evolucionar para ser tan perfectamente adecuado para explorar el universo. Si una civilización está lo suficientemente avanzada, es probable que sus conceptos y su comprensión de la realidad superen con creces la nuestra.
Si fueran lo suficientemente avanzados como para poder cambiar su propia estructura genética, entonces habría mucho mérito en cambiar o evolucionar a un hongo.
Los hongos son muy elásticos, no invasivos, prácticamente inmortales. Están llenos de neurotransmisores y capaces de resistir el espacio. Sería la manera perfecta de explorar y colonizar la galaxia.
Además, una vez que los hongos se establecen, crean una red neuronal subterránea de micelio que se parece mucho a las redes neuronales del cerebro humano o Internet.