La terapia de ultrasonido: efecto rejuvenecedor en las células

Una nueva investigación de Texas apunta a la terapia de ultrasonido, o «zapping» de células humanas con ondas de sonido de baja frecuencia, como una forma potencial de retrasar, detener o incluso revertir el proceso de envejecimiento.

El Prof. Michael Sheetz de la Universidad de Texas realizó experimentos en ratones, cuyas células se “revitalizaron” cuando se expusieron a ondas sonoras de baja frecuencia.

«‘¿Es esto demasiado bueno para ser verdad?’ es la pregunta que suelo hacer”, dijo Sheetz en un comunicado sobre su investigación. “Estamos examinando todos los aspectos para ver si realmente funciona”.

Los experimentos de Sheetz y su equipo produjeron resultados sorprendentes en los roedores de prueba. Corrieron más rápido en una caminadora, y uno de ellos con una joroba se curó de la condición.

Las ondas de ultrasonido, descubrió Sheetz, hacen que las células senescentes reanuden su división mientras detienen la producción de sustancias químicas que contaminan a sus contrapartes sanas.

“Después de un cierto número de divisiones, las células de nuestro cuerpo dejan de dividirse y se vuelven senescentes”, informó Study Finds sobre el artículo. “Algunos secretan toxinas que causan inflamación”.

“Esto se ha relacionado con todo, desde la artritis hasta el Alzheimer. Los científicos se han centrado previamente en ‘lavar’ las células muertas y moribundas. Este es el primer estudio que muestra que en realidad se pueden ‘revivir’”.

¿Es el sonido la cura para las dolencias corporales?

El tipo de frecuencia de ultrasonido utilizada en la investigación es de menos de 100 kilohercios, muy por debajo de los 2000 kilohercios que se usan para imágenes médicas.

Los ratones se colocaron en agua tibia y profunda que cubría al menos la mitad de sus cuerpos. Todos tenían entre 22 y 25 meses, equivalente a un ser humano de 60 o 70 años.

Ondas ultrasónicas

“Las ondas ultrasónicas pierden menos energía al viajar a través del agua que a través del aire”, afirman los informes.

“A los roedores de laboratorio les fue mejor en las pruebas físicas en comparación con sus compañeros puestos en la tina pero que no recibieron tratamiento. También se usaron tintes fluorescentes que iluminan las células senescentes para mostrar las proporciones en los riñones y el páncreas después de la disminución”.

Muchos aspectos de esta investigación son «todavía desconcertantes» para Sheetz, quien admite que no comprende completamente cómo o por qué la terapia funciona como lo hace.

En cuanto a la piel de los ratones, la terapia de ultrasonido también impidió que se desgastara. Si bien las células de la piel humana generalmente comienzan a desgastarse después de unas 15 divisiones, la terapia de ultrasonido ayudó a los ratones a alcanzar las 24 divisiones sin signos de anormalidad.

Terapias de ultrasonido

En muchos sentidos, la terapia de ultrasonido funciona como un ejercicio para distorsionar físicamente las células. También reactiva los sistemas de eliminación de desechos interiores que ya no funcionan en las células senescentes.

El profesor Jurgen Gotz de la Universidad de Queensland , que no participó en el estudio, calificó los hallazgos de «convincentes», aunque dice que se necesita más trabajo para identificar qué parámetros de ultrasonido funcionan mejor.

Particularmente en humanos, existen limitaciones para la terapia de ultrasonido, ya que los huesos y los pulmones pueden bloquear las ondas sonoras. En ese caso, puede ser necesario cambiar las frecuencias para penetrar mejor en estas partes del cuerpo.

Gotz también ha estado estudiando la terapia de ultrasonido y descubrió en sus propios experimentos que las ondas sonoras pueden mejorar la memoria y posiblemente remediar la enfermedad de Alzheimer.

El siguiente paso de la investigación de Sheetz es probar la terapia de ultrasonido en personas, particularmente en aquellas con osteoartritis y úlceras del pie diabético.

“Tal vez es por eso que la música te hace sentir mejor”, escribió un comentarista sobre la investigación. “Desde Mozart hasta el Death Metal, ¡déjalos cantar!”

“Como la mayoría de las curas para cualquier enfermedad que surgen de la gran investigación de los científicos, esto será barrido bajo la alfombra por las grandes farmacéuticas”, sugirió otro.